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Se cumplen veinte años de la Expo 92 y otros veinte de la apertura del Pabellón de Marruecos, hoy sede de la Fundación Tres Culturas.

Este edificio, cedido por el Reino de Marruecos para uso de la Fundación de las Tres Culturas del Mediterráneo, representa por su arquitectura una elaborada muestra del arte marroquí manifestando las múltiples habilidades de sus artesanos. La planta del edificio está inscrita en una estrella de ocho puntas, suavizada por las filas de bóvedas y de ojivas que recorren sus cuatro plantas.

Varias son las técnicas constructivas que se utilizaron en la construcción del Pabellón:

Zellij: mosaico compuesto de pequeñas piezas de barro cocido esmaltado, tallado a mano.

Tadelakt: revoque mural compuesto de arena, huevos y jabón negro, aplicado y pulido con una piedra lisa.

Gebs: yeso con motivos geométricos o florales, cincelado por los artesanos in situ.

Moucharabieh: enrejado de listones de madera utilizados para cerrar ventanas y balcones.

Zouaqs: motivos decorativos geométricos o florales pintados sobre madera.

Kouba: techo en forma de cúpula.

Tras la reformas efectuadas para adecuar el edificio a las necesidades que demandaban las diversas actividades que realiza la Fundación, el Pabellón Hassan II cuenta en la actualidad con las siguientes instalaciones: Auditorio de 200 plazas, Sala Multiusos con capacidad para 70 personas, Plaza Central para congresos y conciertos con capacidad para 250 personas, 400 m2 de zonas expositivas, zonas de restauración, aulas de idiomas, biblioteca y centro de documentación y dos plantas de oficinas.

El Pabellón de Marruecos en la Expo 92 en Sevilla es un edificio calificado por todo el mundo como maravilloso. Se construyó usando técnicas y estilos arabe-musulmanes modernos y tradicionales.

Este pabellón fue construido durante el mismo año 1992. Celebrando 500 aniversario del descubrimiento de las Américas. Sus trabajos coincidiéron también con los de la famosísima mezquita Hassan II de Casablanca.

A parte la estructura, todos los trabajos fueron ejecutados por artesanos marroquies los cuales mostraron todo el saber y el arte que tienen. Eso si, el edificio mezcla, como se ve en esta foto modernidad y tradición con gran sentido artístico.

El pabellón abrió sus puertas para los visitantes durante la Expo 92 antes de terminarse los trabajos. Esto dio a los visitantes una oportunidad única de ver los artesanos, en vivo, construyendo pieza a pieza esta gigantesca obra de arte.

Los que vinieron mas tarde, pudieron apreciar la calidad del trabajo sobre materiales de gran nobleza, ahora veinte años después pueden seguir contemplando esta maravilla de arquitectura en la Cartuja.

Espero que os haya gustado este paseo que disfruté el Sábado 26 de Mayo 2012 para conmemorar el Veinte Aniversario de este fantástico Pabellón, hoy Legado vivo de la Expo 92.

No dejéis de visitar la Cartuja de Sevilla esconde más de una sorpresa y tú ¿La Conoces?, ven a Cartuja.

Jaime Álvarez

Asociación Legado Expo Sevilla