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La Quinta Avenida de la Expo volverá a funcionar como bulevar de servicios de la Cartuja

ABC de Sevilla | Jueves, 01 de Enero de 1970, 00:00:00

El proyecto de reordenación prevé la reutilización de espacios como la estación del monorraíl

Nueve años después de la Expo, la Quinta Avenida del recinto de la muestra universal volverá a estar en activo. Para ello, Cartuja 93 ha proyectado, de forma consensuada con la Gerencia de Urbanismo, la reordenación del bulevar de la que ahora se conoce como Avenida de Charles Darwin, con un objetivo: reutilizar las construcciones y zonas verdes de este espacio como gran zona de servicios de la Isla.

Ahora se la conoce como al Avenida de Charles Darwin pero, durante la Expo, fue -como la de Nueva York- la Quinta Avenida y, ahora, tras su próxima remodelación, volverá a recuperar -en el espacio que hoy ocupa el parque científico y tecnológico de Cartuja 93- su protagonismo de antaño. Ubicada en la zona central del antiguo recinto de la muestra universal, esta avenida, cerca del Palenque y del Monasterio de Santa María de las Cuevas, desemboca en el Camino de los Descubrimientos, que se vislumbra como nueva zona estratégica de la Isla. No en vano, este viario de la tecnópolis se va a reestructurar como nuevo acceso, situado además, de forma decisiva, frente a los terrenos del antiguo Canal del Lago de España, en los que se planea construir un gran aparcamiento. Con éste, por un lado, se daría respuesta a las necesidades de Isla Mágica, que contempla su futura ampliación por esta zona. Por otro, además, se establecería una alternativa para quienes se desplazan al centro de la ciudad, de forma que, tras dejar sus vehículos en la Isla, podrían llegar a pie hasta el Casco Histórico a través de alguna de las dos pasarelas -el actual paso peatonal de la Cartuja se abriría al tráfico- con las que se unirán la Isla y Torneo. INTEGRAR UN ENCLAVE ESTRATÉGICO Teniendo en cuenta el protegonismo que esta avenida va a adquirir en función de los planes previstos para Cartuja 93, se ha realizado un proyeto de remodelación, destinado a reutilizar -en el contexto de la tecnópolis, que aún cuenta con escasas áreas de servicios- las construcciones y espacios verdes de dominio público que ser crearon en esta zona de la Expo y que, tras su clausura, han permanecido en desuso. Así, y según ha sabido ABC, la propuesta de reordenación del bulevar, con el fin de ejecutarla además en los próximos meses, contribuirá a lograr una mayor integración de la Isla en la ciudad. Desde esta perspectiva, la Quinta Avenida se entiende como un viario formado, en realidad, por dos calzadas de tráfico rodado y zona central urbanizada. En el 92, a lo largo del muro de cristal que la recorre, contaba con pequeños locales es uso, sobre todo de restauración -como el de Hungría- y de ocio, incluyendo emblemáticas fuentes, exponentes de arquitectura moderna. En la avenida, está además la estación de monorraíl, también rodeada por el muro de cristal y la pérgola de la que emerge la edificación. Todas estas construcciones y espacios libres requieren de una intervención urgente. De hecho, la hoy conocida como de Charles Darwin es la única avenida del parque que no ha sido modificada tras la Expo. Por ello, ante el estado de sus instalaciones y sus potencialidades de uso, se prevé una actuación que respetará, no obstante, el diseño realizado en su día por el prestigioso equipo SITE oriundo, como la más famosa Quinta Avenida, de Nueva York. DE LA GUARDERÍA A LA FARMACIA La reordenación contempla obras de reurbanización -entre las que se incluye la reposición del pavimento, ajardinamiento o sustitución de lámina de agua por tapizante- y de rehabilitación y construcción de nuevas edificaciones. Habrá algunas demoliciones, aunque sin afectar al característico muro de cristal. En esta nueva gran zona de servicios, habrá espacio para oficinas, entidades bancarias, papelería, farmacia, cafeterías, restaurantes, quiosco de prensa y hasta una guardería. La explotación será, en todos los casos, adjudicada por urbanismo mediante concurso público. Todo con el fin de hacer que la Isla sea más urbana.

Elena Benítez Alonso